Protegemos a los neoyorquinos inmigrantes


Independientemente de su estatus migratorio, estamos aquí para proteger su seguridad y sus derechos.

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La ciudad de Nueva York es la más segura de todas las ciudades grandes gracias a nuestras pujantes comunidades de inmigrantes, no a pesar de estas. Creemos que estos hombres, mujeres y niños son neoyorquinos de pleno derecho, ya sea que estén documentados o indocumentados según la ley federal. Independientemente de su estatus migratorio, estamos aquí para proteger su seguridad y sus derechos.

Con demasiada frecuencia, miembros de grupos de inmigrantes son víctimas de robo, fraude y otros actos de delincuentes. Estos individuos se dirigen a personas que procuran obtener residencia, ciudadanía o servicios legales, y ofrecen asistencia a cambio de grandes sumas de dinero o de información de identidad personal, a veces sin proporcionar los servicios prometidos. Los inmigrantes indocumentados, que suelen temer cooperar con las fuerzas del orden debido a su estatus migratorio, son particularmente vulnerables a la explotación relacionada con su empleo, salario y vivienda.

Nos comprometemos firmemente a proteger a los neoyorquinos inmigrantes con un equipo de fiscales dedicados exclusivamente a combatir el fraude contra inmigrantes y una serie de programas y servicios adaptados a nuestra diversificada población inmigrante. Proveemos educación y alcance comunitario relacionados con posibles fraudes y consejos para evitar ser víctimas de estos. Operamos en dos fiscalías satélites, en Harlem y en Washington Heights, para facilitar el contacto entre los residentes del Alto Manhattan con el personal y los recursos que ofrecemos. Atendemos una línea directa para asuntos de inmigrantes para que las víctimas puedan denunciar los delitos de manera segura y anónima.

 


Casos notables

  • El 6 de diciembre de 2017, Ephraim Vashovsky fue condenado por poner el peligro las vidas de inquilinos inmigrantes en un edificio residencial de East Harlem al crear intencionalmente condiciones peligrosas con el fin de forzarlos a evacuar su apartamento con renta estabilizada.
  • El 1 de junio de 2017, Perla Ozoria, Ambar Ozoria y Vilmania DeJesús fueron imputados por robar más de $28,000 a clientes que intentaban enviar dinero a sus familiares latinoamericanos mediante una agencia de transferencia de fondos.
  • El 23 de enero de 2017, Jenetta Ferguson, una maestra de Inglés como Segunda Lengua, se declaró culpable de robar más de $40,000 a personas con visa de estudiante al prometerles falsamente que les proporcionaría tarjetas de residencia a cambio de pagos en efectivo.
  • El 22 de diciembre de 2016, Antoine Anthony y Joshua Padilla fueron imputados por robar más de $100,000 mediante una conspiración de cheques falsos que afectaron a más de 140 clientes de Citibank, siendo la mayoría de estos neoyorquinos inmigrantes.